La actual crisis económica por la que estamos pasando, afecta de lleno a las mujeres. Esto es algo sobre lo que hemos estado hablando últimamente en clase y sobre lo que hemos reflexionado bastante durante las horas teóricas de esta asignatura. Sin embargo, es hora de que salgamos del aula y sepamos cual es la realidad que se está viviendo ahí afuera. En solamente dos horas de clase, no tenemos tiempo suficiente para hacer un análisis más exhaustivo sobre esta problemática, pero si para acercarnos a las personas con las que convivimos día a día en nuestra facultad y saber que opinan a cerca de todo esto. Pero no solo eso, sino que dentro de esta,  hay mujeres que se han visto directamente perjudicadas por esta crisis y ¿Qué mejor forma de conocer esta realidad que a través de los testimonios de las principales perjudicadas? El personal de la limpieza o la chica de la fotocopiadora se encuentran en una situación límite y no podemos, como futuros pedagogos y pedagogas, permanecer ajenos a los problemas que nos rodean. “Cuando no tenga para pagar el piso, me vendré a dormir aquí”. Esto nos contaba entre suspiros una trabajadora anexionada a la facultad que en estos momentos, se encuentra totalmente perdida y sin saber que hacer.

Los objetivos del video son claros: En primer lugar queremos saber, de boca de los profesores, cuáles son las causas principales por las que las mujeres se han visto especialmente perjudicadas por la crisis para después, escuchar a las propias afectadas como están viviendo estos momentos. Falta dinero en la economía doméstica y por ello, nos vemos obligadas a sacar a los abuelos de las residencias volviendo así, la mujer a su papel tradicional de cuidadora y ama de casa. Esta es una de las principales razones por las que las mujeres nos vemos más afectadas y las cual, se escucha continuamente a lo largo del video.

Nuestra intención fue la de abarcar diferentes perspectivas desde todos los estratos estructurales que abarca nuestra facultad desde lo más elevados a los más bajos. Por ello, intentamos a cercarnos a lugares donde pocas veces picamos a la puerta como es el decanato. Si queremos tener una visión más amplia de la problemática, resulta esencial acercarse tanto a altos cargos como a las personas, que ocupando posiciones menos valoradas, son igual de importantes y se ven directamente perjudicadas. Es necesario romper el techo de cristal que no nos deja alzar la voz y hacernos eco y por ello, aunque al principio del video se ve claramente la situación actual en la que nos encontramos encerradas bajo este techo, quisimos darle una visión optimista a todo esto, logrando al final del video romper con el cristal que nos cubre y nos hace invisibles hasta el momento.

Hernández López Olga

Marcos Palacio Belén

Martínez García Lindsay