¿De qué hablamos cuando hablamos de gestión del tiempo?
La vida universitaria es un reto en si mismo. Aprobar, aprender, conectar con la gente, salir, explorar, hacer trabajos, descansar… todo eso con la curiosidad de quien quiere conocerlo todo y al mismo tiempo aprovechar la experiencia vital sabiendo que, después de un tiempo, vendrá la vida profesional y tendrá muchas más responsabilidades.
La vida universitaria es, además de todo lo que decíamos, un entrenamiento de muchas habilidades que tendrás que usar en el trabajo. Entre ellas, por ejemplo, la de gestionar de manera inteligente tu tiempo. ¡Y no es nada fácil! A veces, te sientas diez minutos a descansar antes de ponerte a estudiar y, cuando te das cuenta, han pasado 4 horas.
Normalmente, intentamos proyectar qué queremos hacer este curso, además, nos proponemos grandes cambios y avances con nosotros mismos: estudiar idiomas, apuntarme al gimnasio, organizarme mejor, apuntarme a un curso de algo que me encanta…
Ahora bien, puede que estos mismos propósitos ya te los hayas planteado antes y no hayan salido tan bien. Probablemente sea la misma lista o muy parecida a la que elaboramos el curso anterior, y que no has sido capaz de cumplir.
Para entender mejor cómo funciona nuestra gestión del tiempo hay que analizar varios factores que quizás estén impidiendo que alcances tus objetivos. El más habitual suele estar relacionado con la programación que hacemos de los objetivos puesto que no se suele ajustar a la realidad.
¡Vamos a ver qué podemos hacer mejor!
Aspectos clave para empezar a autogestionarte con criterio: priorización, realismo en la planificación y hábitos sostenibles.