Las estimaciones de la EPA del tercer trimestre del año 2018, aún siendo favorables en términos generales, muestran nuevos síntomas de ralentización en la economía española. Si bien la tasa de paro nacional se reduce significativamente (situándose por primera vez en la última década por debajo del 15%) estas nuevas estimaciones llevan asociada una revisión a la baja de nuestras predicciones de cierre de año, que sitúan las tasas en 2,5% para el empleo y -10,9% para el paro nacional.
En la cornisa cantábrica Asturias muestra la situación más desfavorable, ya que con las últimas cifras de la EPA nuestras predicciones apuntan a un estancamiento de la cifra de ocupados mientras el número de parados se reduciría un 5,3%, manteniendo la tasa de actividad más baja del país que podría situarse a fin de año por debajo del 51%.
El comportamiento del mercado laboral es más dinámico en Cantabria y País Vasco, donde se espera cerrar el año con ligeros incrementos del empleo (inferiores a los del conjunto nacional) y descensos significativos del paro, que situarían las tasas regionales de paro por debajo del 10%.