Tesis doctoral defendida por Paloma Herrero Racionero
Resumen: Buena parte de los estudios sobre la ‘modernidad alimentaria’ tienden a identificar implícitamente ‘modernidad’ con ‘novedad’, entendiendo grosso modo por ‘alimentación moderna’ la alimentación actual. Al no formular de modo explícito un concepto claro y riguroso de modernidad, no es infrecuente que sus análisis den la impresión de consistir más bien en relatos descriptivos de las sucesivas novedades observadas en las formas de alimentación. Cuando los cambios alimentarios se sumergen, sin embargo, en un más vasto proceso histórico de modernización, esos cambios adquieren nuevos y diferentes significados. Los procesos de secularización, racionalización, alfabetización, burocratización e individualización ofrecen al comensal moderno campos inéditos de libertad y autonomía, al tiempo que le sumen en nuevas formas de dependencia y desconcierto. El material empírico analizado permite observar cómo el comensal español lidia con esas incertidumbres y contradicciones, ya sea reelaborando significados, ya instituyendo nuevas prácticas culinarias. Los modos tradicional, moderno y posmoderno de comer no se muestran entonces como formas sucesivas y mutuamente excluyentes de hacerlo, sino como modelos cuya presencia simultánea les somete a una constante redefinición en la que se pone en juego todo un complejo de saberes y prácticas, de experiencias y sentimientos, de emociones y sensaciones, de identidades personales y colectivas, de intereses y alianzas… que hacen de la alimentación un ‘hecho social total’.